Hacía tiempo que no me detenía tanto a pensar en un sin fin de temas, desde el 1 de Septiembre me ha dado tiempo a pensar sobre la amistad, sobre esa amistad que siempre está ahí y la que está ahí pero en realidad no está, el tiempo se encarga de separar a aquellos que pensabas que eran indispensables en tu vida y luego te das cuenta que no lo eran tanto, también he pensado en aquellas personas que, quizás no prestabas tanta atención y que sin embargo, por mucho tiempo que pase sin saber de ellas han conseguido el estatus de imprescindibles, ¡bien!.
También he pensado en si estoy en el lugar adecuado o si debería cruzar la atmósfera y respirar aire nuevo, eso lo pienso cada vez mas a menudo, con todo lo que ello conllevaría, sobretodo a nivel familiar, pero hay tanto que ver en el exterior, que me gustaría sentir algo nuevo durante un tiempo y luego pienso que a lo mejor no lo soportaría ni dos días.
En el fondo soy una egoísta, porque lo quiero absolutamente todo, quiero vivir en una ciudad donde haya un buen clima, donde la gente tenga cierta educación y valores, que parece, a mi alrededor escasean, un lugar donde no vivir detenida por el tiempo, para eso ya habrá tiempo mas adelante, ¿existe realmente?
Las nuevas etapas en la vida te hacen replantearte tu propia vida, te hacen mirar al cielo y pensar que ahí están todas las respuestas, sin embargo solo consigues ver formas en las nubes.
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